1. Empieza ya:
Haz una lista con tus limitaciones. Identifica cuáles son los hábitos que te están frenando en el proceso de un cambio para llevar una vida saludable, así logras ir eliminándolos poco a poco.
2. Hazlo un hábito:Encuentra eso que te apasiona (correr, andar en bici, nadar) y dedícale mínimo una hora al día, lo que equivale al 4% de tu vida. Levántate de la cama una hora antes y haz ejercicio; notarás el cambio.
3. Eres lo que comes:Cuida tu cuerpo y aliméntate para nutrirlo. El 70-80% de nuestros resultados son derivados de nuestra alimentación. En lugar de hacer dos o tres comidas grandes, haz cinco al día, lo que te ayudará a controlar el apetito y a mejorar tu metabolismo.
4. Ponte metas:Escribe tus metas, ponte tiempos y entrénate para lograrlos.
5. Comprométete:La parte más difícil de lograr tus objetivos está en la constancia y la dedicación. La clave para lograrlos es encontrar algo que te apasione; ya sea correr, nadar, escalar, bailar, etc.
6. La mente es poderosa:
No solo entrenes tu cuerpo, sino también tu mente. Visualízate logrando tus objetivos.
7. Descansa:Tu cuerpo necesita mínimo un día para recuperarse y prepararse para el siguiente entrenamiento. Duerme lo suficiente y descansa cuando tu cuerpo te lo pida.
8. Motívate:Siempre ten en mente porqué estás haciendo todo esto.
9. Escucha a tu cuerpo:Aprende a respetar tus límites y saber parar cuando tu cuerpo te lo pida.
10. Sé paciente:
Es la clave del éxito. No te des por vencido y no seas tan exigente contigo mismo; es importante tener paciencia para ver los resultados