París, la bella ciudad romántica, es reconocida internacionalmente por sus contribuciones a la moda, la gastronomía y por supuesto, a todas sus artes. Pocos países poseen monumentos impresionantes tan icónicos como la Torre Eiffel, un hito histórico en París y en todo el mundo. El 31 de marzo de 1889, la Torre Eiffel abrió sus puertas al público, convirtiéndose así en símbolo por excelencia de la capital francesa. Para conmemorarla, te compartimos 11 fun facts que probablemente no conocías.
La Torre Eiffel, hoy en día, es el ícono de todo Francia. Recibe casi 6 millones y medio de visitantes al año.
Se construyó en el marco de la Feria Mundial de la Exposición Universal, para conmemorar el centenario de la Revolución Francesa.
En un principio, estaba pensada para ser destruida veinte años después de la Exposición Universal. No obstante, en 1900, la Armada Francesa añadió la antena de radio en el punto más alto, por lo que se salvó de la destrucción.
Con 324 metros de altura (ya considerando la antena que tiene en la cúspide), fue el edificio más alto del mundo durante 41 años hasta 1930, junto con el Edificio Chrystler en Nueva York. Todavía hoy es la estructura más alta de París y la quinta de Francia.
París fue la única ciudad que aceptó hacer la Torre Eiffel. El proyecto de Gustave Eiffel se presentó en varias ciudades, pero ninguna aprobó su construcción.
La familia Eiffel era originaria de Alemania y se llamaban Bönickhause. Pero los franceses no podían pronunciar su apellido, por lo que Gustave se cambió el nombre en 1880, nueve años antes de la inauguración de la torre.
De 107 propuestas, ganó el proyecto original de la torre, presentado por los ingenieros Maurce Koechlin y Émile Nouguier y, mejorado con sus aportaciones más decorativas, por el arquitecto Stephen Sauvestre.
El proyecto requería de mucho metal y también mucha mano de obra. Trescientos trabajadores del acero trabajaron dos años, dos meses y cinco días construyendo la torre. Utilizaron más de 18 mil piezas metálicas individuales y dos millones y medio de remaches.
La torre cambia de color cada cinco años. Se usan 500 toneladas de pintura para evitar que se deteriore.
En 2005, se instaló una pista de patinaje sobre hielo en su primer piso. Mide 190 metros cuadrados.
Cada noche, la torre se ilumina con su alumbrado dorado y resplandece con sus destellos durante 5 minutos cada hora, mientras su faro ilumina París.