Lo más reciente

BAHÍA MAGDALENA

La sed de aventura no proviene de la necesidad de trazar nuevas tierras o descubrir nuevas especies, esos son objetivos secundarios; la sed de aventura viene desde adentro de nosotros mismos. Es nuestra necesidad interna de ampliar nuestro conocimiento a través de experiencias para poner a prueba los límites de nuestra propia fuerza, capacidad y salir de nuestra rutina diaria de ciudad.

Durante las expediciones del “Llamado del Tiburón” publicadas en Pelagic Life sobre Bahía Magdalena, no solo hemos encontrado áreas realmente significativas a nivel de conservación, sino que junto a los pescadores locales hemos despertado el interés por migrar de la pesca poco regulada del tiburón, al desarrollo de un sitio turístico con todo el potencial para experimentar el nado con tiburón y otras especies.

Durante décadas, el tiburón ha sido percibido como un animal de naturaleza agresiva, cazadora de humanos y en general negativa. Esto se lo debemos principalmente a algunas versiones fílmicas de Hollywood durante los años 70, en que un gran tiburón blanco devorador de hombres ataca a turistas en playas estadounidenses, detonando así una aspiración de héroes de novela por convertirse en caza-tiburones.

Los tiburones son depredadores por naturaleza, sin embargo, no son animales agresivos y mucho menos “come hombres”, pues no formamos parte de su menú. Comparativamente, es más la gente que muere a consecuencia de tostadores defectuosos, piquetes de abeja y de mosquitos, así como de mordeduras de perros domésticos. Los tiburones tienen más de 350 millones de años –incluso, existen antes que los dinosaurios– y sin embargo, nuestro conocimiento acerca de ellos es mínimo y en muchos aspectos alejado de la realidad.
Sin duda, nadar con tiburones es una experiencia mágica, pues la sensación de convivencia es inigualable, aunado al factor de la adrenalina ante una situación iniciática en la que compartes un primer momento con un animal totalmente desconocido y mitificado. Ahí es cuando te das cuenta de que no entras en la ecuación de las preferencias alimenticias del animal.
Observarlos nadando a tu lado, en su hábitat natural, es realmente asombroso, y después de un par de chapuzones, entras en un estado de tranquilidad, concentración y goce que realmente te desconecta de la realidad cotidiana.

BAHÍA MAGDALENA - galeria04_bahia-1024x704

Existen diversos sitios alrededor del mundo en los que se puede experimentar el buceo con tiburones. Sin embargo, son muy pocos los lugares en los que se puede nadar con ellos sin previa experiencia o sin contar con una certificación de buceo. Para ser elegible, es necesario tener experiencia intermedia de nado en aguas abiertas, un interés significativo por la naturaleza, el mar, la conservación de las especies marinas y sobre todo, una actitud positiva para experimentar algo nuevo.
En lo personal, lo que más disfruto de estas expediciones es la convivencia con amigos y gente nueva, las pláticas en el mar lejos de un celular, un i-pad o un centro comercial, y por supuesto, la incertidumbre de que estás en un lugar en el que te puedes topar con un fenómeno natural extraordinario en cualquier momento. Para mí, esto siempre es el la cereza del pastel.
Para planear la siguiente aventura… Cierro los ojos y ¿qué me imagino?

Algo inesperado, misterioso, mar, dunas de arena, naturaleza, aire puro, comida fresca, un lugar virgen, camaradería, experiencia en el agua, vida, exploración marina y con suerte, un posible bonus de conocer e interactuar con animales como lobos marinos, ballenas azules, jorobadas, orcas; o con tiburones ballena, mako, azul, silky, martillo, delfines, marlín, dorado, wahoo, mola mola, entre otros.

Esto y más lo podemos encontrar a lo largo de la costa occidental mexicana en el estado de Baja California Sur en Bahía Magdalena. La bahía es bien conocida por la migración estacional de la ballena gris que llega durante el invierno desde Alaska a través de las barreras de las Islas Magdalena y Santa Margarita en busca de agua caliente para aparearse.
Es hora de que busquemos recuperar el elemento de la aventura que impulsó originalmente a los que nos precedieron para cruzar océanos y grandes extensiones de terreno desconocido.
Tenemos que traer el riesgo y la aventura de nuevo en nuestras vidas, necesitamos determinación dentro de nosotros mismos, saltar sobre nuestra propia existencia y conducir hasta el borde de nuestras posibilidades.

Una vida plena no se da, se toma. La decisión es sencilla: Bahía Magdalena!

BAHÍA MAGDALENA - galeria03_bahia-1024x704

INFORMES

pelagiclife.org/bluemakomagbay/
pelagiclife.org/silkyhammerheadsmagbay/
pelagiclife.org

EVENTOS MARINOS

De diciembre a marzo migración de la ballena gris.
De marzo a mayo tiburón mako y azul
De marzo a mayo se ven tiburones azules y makos, y con suerte se pueden ver tiburones zorro (thresher) saltando en la superficie. Durante este tiempo, ¡es también común ver ballenas grises dentro de la bahía! Los tiburones mako y azul de Bahía Magdalena son el producto de un esfuerzo para reemplazar la pesca de tiburones con el nado con tiburones.
Actualmente la tasa de éxito es de + 80% para ver tiburones.
De junio a agosto tiburón martillo y silky o piloto.
Durante los meses de verano, de junio a agosto, el agua tibia del Pacífico atrae grandes depredadores pelágicos a Bahía Magdalena. No es raro estar rodeado de escuelas de mahi mahi, wahoo, atún, bonito y hasta un curioso tiburón ballena. Pero la atracción principal en estos meses son los numerosos tiburones sedosos nadando por todos lados. Aunque por lo general son muy tímidos, durante esta temporada, si tienes suerte, puedes encontrar tiburones martillo.

CÓMO LLEGAR

Viajar a La Paz en Baja California Sur, tomar carretera hacia San Carlos para llegar a Bahía Magdalena.

DÓNDE DORMIR

Hotel incluido en el paquete de la expedición en Playa Magdalena.

PROTECCIÓN Y CONSERVACIÓN

pelagiclife.org