El ser humano siempre ha buscado la manera de dejar huella en la historia. Ya sea a través de jeroglíficos, de arte, de arquitectura, o de monumentos gloriosos. Simplemente, como humanos, siempre hemos buscado ser parte de ese archivo trascendental en los recuerdos de la humanidad. Hoy, Balmaceda Studio inspira su nueva colección de tapetes en esta magnificencia reflejada en los monumentos; pero le da un nuevo significado metafórico, al ponerlo en comparativa con la grandeza del alma.
Nos volvemos grandes al hablar de nuestra propia alma; aquello que nos apasiona, que llena de color nuestra creatividad, y que alimenta nuestros sentidos. El alma del ser humano no conoce de dimensiones, pues a través de ella la distancia se vuelve relativa, y el tiempo puede avanzar rápido, o muy lento. El alma escribe historias y es la responsable de materializar todo aquello que nuestra mente sólo imagina.
El tamaño de un monumento se vuelve subjetivo al pensar en todo aquello que viene del alma. Y así como esta nueva metáfora, Balmaceda Studio materializó una colección de tapetes artesanales, que a través de cada hilo cuenta una nueva historia. Paideia, Nous, Philos, Parameno, Stereotita, Isonomia, Parrhesia y Michaniki son los nuevos protagonistas, que a través de su magnificencia, reflejan la maravilla de un monumento hecho con el alma.
¿Dónde?
Sierra Madre 380, Lomas de Chapultepec
UNA ENTREVISTA CON LA MENTE CREATIVA DETRÁS DE BALMACEDA STUDIO
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