La magia de un buen destilado siempre reside en el líquido, eso jamás estará a discusión. Pero hay otro elemento que siempre será parte de la historia de una marca: la botella. Hay algunas que por su diseño y su manufactura se han vuelto objetos de deseo coleccionables. Te compartimos cuáles son nuestras favoritas.
Historia y artesanía en conjunto para crear estas botellas. Clase Azul es un ícono internacional no solo por crear tequila premium, sino que sus decantadores son parte del home decor de muchos.
El ícono en cognac. Louis XIII llama la atención por su maestría en cristalería. Una vez terminado el líquido, esta botella se vuelve ideal para decorar con una pulcritud muy particular el hogar.
Cuando hablamos de botellas particulares, Mezcal Mitre se corona en la cima. Inspirada en el emblemático jaguar, esta botella, sí o sí, llamará la atención como objeto decorativo.
Diamond Jubilee by John Walker & Sons
Definitivamente, la joya de la corona. Un coleccionable de lujo que se creó para celebrar el 60 aniversario de la reina Isabel II. Este destilado es probablemente el whisky más exclusivo del mundo.
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