
Hay lugares que no solo alojan cuerpos, sino historias. Casa Antonieta es uno de ellos: un lugar donde la piedra virreinal cuenta historias del siglo XVII y la luz de Oaxaca ilumina los corazones de quienes la visitan. Más que un hotel boutique, es una referencia a la slow life: un espacio que invita a desconectarse para reconectar, con uno mismo y con el sabor de esta mágica ciudad.

Un edificio que abraza el tiempo
Ubicado en lo que alguna vez fue parte del convento de San Pablo, este lugar restaurado mantiene su galería de arcos de tres niveles, una joya arquitectónica que mezcla historia y personalidad, ahora en armonía con detalles de diseño moderno que se sienten frescos, sin perder el alma del pasado. Sus habitaciones, únicas, con techos altos y detalles que mezclan épocas.

Whitelab / @Whitelab_mx

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El Patio: donde se unen dos mundos
El alma de Casa Antonieta late en su patio central, en donde huéspedes, comensales y locales se encuentran de forma orgánica. Es el lugar ideal para empezar tu día con un café de Finca Las Nieves (100% orgánico, cultivado en San Juan Lachao), o para disfrutar la tarde entre plantas, luz dorada y conversaciones en Amá Terraza, un rincón hecho por el arte de simplemente estar.

Sabores que conectan
Muss Café es un espacio cozy, donde el café y la cocina se convierten en excusas perfectas para compartir mesa con otros huéspedes o con locales que conocen bien sus rincones favoritos.

Cindy Compeán / @cindycompean

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Amá Terraza es todo lo contrario: una combinación de nostalgia y frescura en cada plato, en cada copa de vino natural mexicano, y en cada momento. Es el lugar ideal para perderse en un libro, disfrutar la luz de la mañana o un aperitivo al atardecer.

Whitelab / @Whitelab_mx

Cindy Compeán / @cindycompean
Para quienes se animen a vivir la experiencia completa, hay rituales que hacen toda la diferencia: pedir al equipo que cuente la historia del edificio (cada piedra guarda un pedazo del pasado), desayunar en el patio mientras el sol se cuela entre los arcos, y subir a la terraza al atardecer (la luz pinta todo de dorado y parece un cuadro en movimiento).

Casa Antonieta no se visita, se habita. Y cuando lo haces, es imposible no sentir que, de alguna manera, ya pertenecías ahí.
D. Miguel Hidalgo 911, Centro, 68000 Oaxaca de Juárez, Oax., Mexico
P. https://www.casaantonieta.com/
IG. casaantonieta