Daniel Arsham es una interesante mezcla entre celebridad, científico, mago e intelectual. Su componente lúdico, sus juegos mentales y visuales, su fijación con el tiempo, su innovación constante y la metodología que utiliza para obtener nuevos resultados, lo convierten en una de las personalidades más fascinantes de nuestra época.
Entre sus temas más recurrentes se encuentra el tiempo. El artista responde a la pregunta de qué es realmente el tiempo, buscando en el pasado. Plantea ideas recurrentes de la memoria de la infancia para crear dislocaciones temporales y las proyecta sobre el presente y el futuro. A lo largo de su carrera, Arsham ha mantenido una preocupación por imaginar los objetos cotidianos de hoy, tal como se verían en el futuro, en forma de artefactos excavados. Muy a menudo, busca en su propio pasado tomando elementos de su infancia para reformarlos.
El curador del Cincinnati Contemporary Arts Center describe su obra como “una oda a la nostalgia, haciendo referencia al pasado a través de objetos a los cuales les da un nuevo propósito como catalizadores. Hace que la mente del siglo XXI viaje hacia atrás y hacia adelante a la vez”.
SU OBRA
Centrándose en la cultura de masas, Arsham transforma objetos modernos universales y los imagina en años futuros, dentro de una ficción creada por él mismo.
Comenzó cofundando Snarkitecture, un colectivo artístico que se dedica a crear nuevas experiencias dentro de edificios ya existentes, bien sea reutilizándolos o incluso haciendo un uso indebido de los espacios arquitectónicos.
Ese tono rebelde y lúdico se ha mantenido en su obra, la cual incluye escultura, pintura, películas, diseño de escenarios y colaboración en videos musicales. Las paredes parecen derretirse, las formas del techo parecen gotear, las escaleras no van a ninguna parte.
Su particular paleta monocromática, que él atribuye a ser casi totalmente daltónico, y su estilo de futurismo deconstruido, lo han hecho tremendamente popular tanto entre conocedores de arte como entre celebrities de la talla de Usher, Jay Z y Pharrell Williams.
En colaboración con el músico y productor Pharrell Williams, Arsham rehízo su primer teclado Casio MT-500 en ceniza volcánica, vidrio roto, cristal y acero.
“PASO MUCHO TIEMPO PENSANDO EN FORMAS EN LAS QUE PUEDO DISLOCAR A LAS PERSONAS DEL MOMENTO PARTICULAR QUE ESTÁN VIVIENDO”.
PYRITE AND SELENITE TEDDY BEAR
En Pyrite and Selenite Teddy Bear (Large) de Arsham, lo que al principio parece ser un osito de pelu- che muy tierno, está compuesto de pirita, selenita, cristales e hidrostona para crear una distorsión increíble en el espectador. La obra tiene la dualidad de ser familiar y ajena a la vez: un objeto amado del pasado distante, descartado y olvidado durante mucho tiempo. Esta obra única se ejecutó en 2017, pero da la impresión de venir de épocas pasadas.
FROM ISOLATION, NEW PATHWAYS
El aislamiento que provocó la pandemia forzó al artista a tomar una pausa en sus múltiples viajes (solo este año tenía más de ocho exposiciones programadas en distintos continentes) y de su ritmo de vida acelerado. La pausa lo hizo tomar un giro inesperado: pasar de la escultura a la pintura, un medio que había abandonado.
Arshman abandonó el acrílico y se concentró en el óleo. Durante meses pintó todos los días, creando nueve impresionantes obras a gran escala que se exhibirán en la galería Perrotin en enero de 2021.
El verse obligado a crear arte en soledad contrasta notablemente con su modus operandi típico y altamente colaborativo. Marca una transición necesaria en la carrera de cada artista para realmente evolucionar.
NO TAN SENCILLAS COLABORACIONES
Arsham ha explorado su concepto de arqueología ficticia a través de colaboraciones con marcas como Dior, Porsche, Adidas, Pokémon y muchas otras. Al trabajar con objetos de lujo, moda o entretenimiento, el artista evoca un retrato de la vida contemporánea refractado a través del lente del tiempo distorsionado, y pone distancia entre el ahora y la “reliquia del futuro”.
1. X DANIEL ARSHAM (2018)
Cuando el diseñador Kim Jones tomó las riendas de Dior Homme, rompió paradigmas desde el inicio llevando a Kaws a su primer desfile. Para ese entonces ya no existían divisiones entre el arte y la moda. Esto los llevó a tomar a Daniel Arsham como el cerebro detrás de su siguiente desfile.
Consistió en un set de una fluorescente arena rosa, con cuatro letras erosionadas de gran tamaño que deletreaban Dior. Además de la pasarela, ambos crearon una serie de reliquias del fundador de la casa de moda, Christian Dior, haciendo referencia a su antigua oficina. La colección se agotó instantáneamente, llegando rápidamente al mercado de reventa por un precio mucho mayor, algo muy común en las piezas más hype.
2. POKÉMON (2020)
El sueño del streetwear: unir la relevancia cultural de Pokémon con el logo de Daniel Arsham. Desde versiones de tamaño real de Pikachú y Charizard hasta cartas fundidas, la colección fue un éxito instantáneo. Además de las obras de arte de edición limitada, crearon una colección de ropa con Uniqlo.
3. HEINZ X DANIEL ARSHAM (2019)
Para ese entonces, el artista en cuestión ya era uno de los más solicitados del siglo XXI. Al igual que Jeff Koons y Takashi Murakami, el trabajo de Arsham lo había posicionado en el tope. Razón por la cual Heinz lo buscó para transformar la clásica lata de sopa de crema de tomate en blanco y menta. Todo en la etiqueta cambió, desde el logotipo “A” hasta el mensaje de caducidad “Estd. 3019”, en referencia a la obsesión del artista por el futurismo.
4. KITH X SNARKITECTU- RE (2015)
Kith es sin duda una de las marcas más veneradas del streetwear, una constante en la moda durante casi una década. Durante ese tiempo, se ha transformado de una pequeña boutique de Nueva York a una marca global con tiendas en tres países. Como fan desde hace mucho tiempo y amigo cercano del fundador, Arshman es siempre el encargado de crear sus nuevas tiendas.
Y la de Brooklyn es la favorita de muchos. Tiene 700 esculturas de unos Nike Air Jordan colgadas en el techo y paredes, creando una tienda que parece más una galería que otra cosa. No solo un lugar donde las personas compran, sino donde se reúnen y experimentan nuevas sensaciones.
5. PORSCHE X DANIEL ARSHAM
El gigante de los fabricantes de coches deportivos tuvo el año pasado uno que fue tema de conversación. Resultado de una erosión de cristal, con la matrícula ARS- HAM 3019, lleno de dibujos internos, el Porsche 992 intervenido por Arshman resultó ser completamente funcional, y a la vez una obra de arte. Aunque el artista no permitió que nadie más lo manejara. Mientras que este mismo año recrearon en conjunto un 911 turbo de 1986 con un diseño retro, que se encuentra recorriendo Asia en este momento.
6. RIMOWA X DANIEL ARSHAM (2019)
En una industria completamente distinta a las anteriores está Rimowa, el fabricante de maletas propiedad de LVMH que se caracteriza por sus colaboraciones con Supreme, Off -WhiteTM y Alex Israel. No quisieron quedarse atrás y buscaron a Arsham para crear una serie de piezas de edición limitada.
La “future relic” estuvo inspira- da en objetos antiguos alusivos a Rimowa, y creó un portafolio vintage de la marca fundido en cristales y con el efecto erosiona- do característico de la obra del artista. Con un pequeño logotipo, “Arsham” se convirtió en una de las intervenciones más buscadas del año. Un clásico del futuro.
7. DISNEY X DANIEL ARSHAM (2019)
Disponible exclusivamente en Shanghai el año pasado, la versión de Daniel Arsham del Mickey Mouse se presentó en tres tamaños diferentes, con patrones dibujados a mano y logotipos de Arsham Studio bordados. Como era de imaginarse, estos coleccionables se agotaron rápidamente para revenderse en el mercado secundario.
8. PHARRELL WILLIAMS X DANIEL ARSHAM (2013)
Arsham y su equipo tomaron el cuerpo completo de Pharrell, creando una escultura del cantante que parece moverse. Utilizaron más de 100 kilos de vidrio roto para darle vida a la pieza, con resultados sorprendentes.
9. DANIEL ARSHAM X HAJIME SORAYAMA (2019)
Hajime Sorayama es uno de los artistas mejor conocidos de Japón. Aclamado por sus provocativas ilustraciones de robots femeninos, ha inspirado a artistas como Kaws y Arsham. Este último dio a conocer el año pasado una escultura de dos manos entrelazadas, con el estilo característico de cada uno de los artistas. El brazo dorado metálico de Sorayama mostraba cables por fuera y elementos típicos de un robot, mientras que el de Arsham estaba elaborado con cristales erosionados. Estas son tan solo algunas de las colaboraciones de Daniel Arsham, que dejan claro el valor de su marca a nivel global.
Es muy interesante ver cómo el artista ha pasado de diseñar escenarios en el ballet a un Porsche, demostrando su versatilidad como creador.
LA FORMA DEL TIEMPO
Dentro del diálogo cultural que es el arte contemporáneo, Daniel Arsham aporta un principio e incluso una ideología. En palabras del artista, el trabajo de su disciplina es ver la vida cotidiana y mostrar las cosas invisibles que están fuera de ella. No hay duda de que su obra lo logra.
La inmediatez y lluvia de emociones de los espectadores al plantarse frente a una de sus obras muestra cuán asertiva es su labor. Se adentra dentro del espacio que ocupamos, y atrae a una audiencia sumamente variable a incorporarse a su vez en el espacio que las obras ocupan.
Todo sucede en un mundo imaginario, que está tanto en el futuro como en el pasado. Se pierde en una ecuación visual y revela un mensaje: el tiempo es moldeable.
Como bien afirma el conocido artista contemporáneo Marc Quinn:
“A TRAVÉS DE LA OBRA DE ARSHAM VISLUMBRAMOS, DESDE UNA DISTAN- CIA PRUDENTE, LAS RÁFAGAS DE LOS TIEMPOS QUE NOS ESPERAN A TODOS. Y NO HAY NADA MÁS EMOCIONANTE QUE MORIR Y VIVIR PARA CONTARLO”.
Texto por: MYRTHA HERRERA ALMANZA Y MARIA TERESA CARMONA ARISTEGUIETA
collectum es una firma boutique de asesoría en arte, dedicada a la adquisición y venta de obras de arte contemporáneo, así como a la ejecución de desarrollos inmobiliarios que incluyan arte en su propuesta. www.collectum.art
