La dulcería mexicana es uno de los íconos de la riqueza gastronómica de nuestro país. De to- dos los estados de la República, uno de los que se distingue por su tradición y variedad en la producción de dulces es Puebla. Desde la época de la Nueva España, los talleres de dulcería artesanal y las cocinas de los conventos poblanos se especializaron en el desarrollo de creativas y deliciosas recetas que dan lugar a los manjares que seguimos disfrutando hoy en día.
Una de las dulcerías con mayor tradición e historia de la ciudad de Puebla es La Gran Fama, ubicada en el centro de la capital, sobre la famosa “calle de los dulces” o “calle de Santa Clara”, cerca del convento de las monjas clarisas. La Gran Fama abrió sus puertas en 1882 y es la única de las dulcerías de aquel entonces que se mantiene hasta la fecha.
Durante varias generaciones, se han distinguido por fabricar dulces típicos de nuestro país, siempre con mucho amor y dedicación. Así mismo, a lo largo de los años, han ideado nuevas recetas para sorprender a sus clientes y dejarlos con un dulce sabor de boca en cada visita.
Hoy en día, cuentan con una extensa selección de dulces, entre ellos alegrías, camotes, macarrones, muéganos, molletes, turrones, trufas, dulces de pepita, fruta cristalizada, tortitas de Santa Clara y muchos más. La fusión de culturas es evidente en la preparación de cada uno de ellos, ya que los sabores del México prehispánico y la influencia española están presentes en la selección de ingredientes.
Si aún no conoces la gran variedad de dulces típicos de México que preparan en La Gran Fama, te dejamos algunos de nuestros favoritos que no puedes dejar de probar.
MOLLETES
Los molletes fueron creados por las monjas clarisas para festejar a su patrona, santa Clara de Asís. Este exquisito postre consiste en un pan artesanal, relleno de crema pastelera envinada y coco, cubierto con dulce de pepita. Única- mente se prepara durante una corta temporada, comenzando el tercer domingo de junio para festejar el Día del Padre y culminando el 11 de agosto, día de santa Clara de Asís.
ALEGRÍAS
Las alegrías son un clásico en México. Este dulce se prepara con semillas de amaranto reventadas al comal, que después se cubren con jarabe de piloncillo o miel de abeja. Se dice que algunas culturas del México prehispánico, como los mexicas, preparaban estos dulces para alimentarse y llenarse de energía, o como un tributo a los dioses.
CAMOTES
Los camotes son los dulces poblanos por excelencia. Como su nombre lo indica, se hacen con puré de camote que se divide en pequeñas porciones, se bañan en jarabe o se espolvorean con azúcar, para después hornearlos. Normal- mente vienen envueltos en papel encerado y muchas veces se decoran con flores u otros diseños. Además, las recetas más recientes mezclan la pasta de camote con diferentes frutas para crear nuevos sabores, como piña, fresa o coco.
DULCES DE PEPITA
Los dulces de pepita incluyen jamoncillos y otras figuras hechas a base de semillas de calabaza. La receta original se hacía con almendras importadas de España, pero el costo era muy alto. Al ver que en México abundaban las calabazas, se ideó una nueva preparación en la que se sustituyeron las almendras por pepitas, lo que dio como resultado un estupendo manjar.
MUÉGANO
Los muéganos son un dulce a base de harina, manteca vegetal, leche, huevo, piloncillo y miel de abeja. Por ser crujientes y exquisitos, se encuentran entre los dulces favoritos de locales y extranjeros. Además, es un dulce de gran tradición, pues se lleva preparando en los hogares de familias mexicanas desde principios del siglo XX.
FACTS
- La Gran Fama fue reconocida por el Ayuntamiento de Puebla como Negocio Centenario de la ciudad.
- Su tienda en el centro histórico de Puebla está ubicada a un costado de la casa de los hermanos Serdán, líderes de la Revolución Mexicana.
Texto por Sofía Gutiérrez en colaboración con La Gran Fama
Fotos: Claudia Soto de La Gran Fama
