
Tuvimos el privilegio de conversar con Mauricio Umansky, el reconocido agente inmobiliario y empresario de renombre internacional. Originario de la Ciudad de México (25 de junio de 1970), Umansky es cofundador y director ejecutivo de The Agency, una destacada firma con un portafolio global de bienes raíces de lujo, que incluye residencias en venta y renta, desarrollos nuevos, propiedades comerciales y resorts. En su entrevista, Mauricio compartió con nosotros la apertura de su emblemática agencia en nuestro país, lo que marca un hito en el mercado inmobiliario mexicano de lujo.

Entrevista:
The Agency ha crecido a nivel internacional sin perder su esencia de boutique. ¿Qué aspectos del diseño y de la experiencia ayudan a mantener esa identidad en cada ciudad, especialmente en un lugar como la Ciudad de México?
Lo principal, y con gran importancia para nosotros, sería escoger a la gente correcta. Nosotros abrimos 30 oficinas al año, y es importantísimo tener socios que sepan manejar todavía el negocio como una boutique y no nada más como una empresa grande. Realmente lo que hace a The Agency una “boutique” es cómo combinamos lujo y servicio al cliente; y cuando puedes hacer esas dos cosas y volverte un consultor y no nada más un vendedor, logras tener una empresa boutique exitosa, que realmente le da el servicio al cliente que este se merece.
México no es solo una nueva sede para The Agency, sino también forma parte de tu historia personal. Entonces, desde una óptica de lujo y diseño, ¿cómo ves la posición de la Ciudad de México en la industria internacional y qué representa para ti inaugurar una oficina aquí?
Inaugurar una oficina aquí representa todo para mí, esto es un sueño que he tenido toda la vida. Nací en la Ciudad de México, me gradué de la de prepa aquí, soy 100% patriótico a México, y me encanta estar en Estados Unidos y decirle a todo mundo que soy mexicano. Inaugurar la oficina aquí es importantísimo para nosotros. Este ha sido el sueño, aunque hemos abierto por todo el mundo, abrir aquí me da la oportunidad de trabajar con mi primo Ricardo y con su socio Alex, que son gente increíble, y realmente queremos crecer y enseñarle a México el negocio inmobiliario y de corredores. Desde cómo hacer las cosas de manera diferente y una forma de trabajar diferente a lo que están acostumbrados, desde cómo se vende hasta cómo se presenta una casa, desde las fotos hasta las redes sociales. De hecho, nosotros tenemos la red social más grande del mundo de los negocios de inmobiliaria. Y nosotros vamos a promover México por todo el mundo.
¿Qué hace que la Ciudad de México se sienta única dentro del mundo del lujo?
Tenemos casi 150 oficinas por todo el mundo, ya sea Europa, Caribe, Estados Unidos, Canadá, etc., pero México está muy reconocido ahorita. La Ciudad de México está brillando por su comida, por su arte, por su baile y por su gente; realmente todo mundo quiere estar ahorita en México, lo que la convierte en una ciudad importantísima en el mundo y tener una oficina que es de gran importancia para nosotros.
¿Cómo imaginas que The Agency pueda integrarse de forma auténtica a esta esencia de la ciudad tan rica y tan cultural alineando los valores que caracterizan la Ciudad de México?
Va a ser muy fácil para The Agency aclimatarse a la Ciudad de México porque somos mexicanos. Realmente lo difícil fue aclimatarse en Estados Unidos. Pero, como somos mexicanos, esto es llegar a nuestro hogar.
¿Hay algún tipo de arquitectura, diseño de interiores o detalles estéticos que consideras indispensables al momento de representar una propiedad de alto perfil?
No, para mí hay muchos diferentes gustos. Yo siempre digo que hay 31 sabores de helado en una heladería, a alguien le va a gustar vainilla y a la otra persona, chocolate. Realmente hay mucho de todo, hay muchos diseñadores de interiores buenísimos, así como de arte y arquitectura, de todo el mundo. Obviamente, México tiene una súper arquitectura, y tenemos arquitectos famosos por todo el mundo. Este país tiene mucha historia, a diferencia de Estados Unidos que no tiene casas de 1800, haciendas, ranchos viejos, etc. Realmente va a ser un placer, poder enseñarle al mundo nuestra historia y cultura plasmadas en el mundo inmobiliario.
¿Qué tan importante es para ti que una propiedad cuente con una narrativa visual clara desde sus interiores?
Es muy importante. Cuando nosotros estamos poniendo una casa para vender, siempre nos gusta asesorar al cliente sobre cómo hay que limpiar la casa, cómo hay que sacar las fotos, cómo es el acomodo de muebles, y por qué es importante. No solo porque sea importante para mí, sino porque es importante para el cliente. Esa es una parte importantísima que damos como servicio al cliente.
Hablando un poco más de ti, de Mauricio, ¿cuál es una textura que te inspira?
Ahorita mi gusto está en el modernismo, lo contemporáneo, que los espacios se sientan limpios, me encanta lo italiano y también lo orgánico. Me gusta sentir el mundo: las maderas, las diferentes piedras, pero, sobre todo, me gusta que todo en mi casa me haga sentir bien, que cuando yo entre a mi espacio -a lo que es mi santuario- me haga sentir tranquilo, que las luces sean tenues, que los colores sean cálidos y realmente entrar en una zona zen.
¿Tienes algún diseñador, arquitecto o artista mexicano que te guste o te inspire?
Varios, en específico Kalach y Legorreta. Pero considero que mi buen amigo Moisés Becker es uno de los mejores arquitectos del momento.
¿Qué prefieres en estilo, algo más minimalista y limpio o maximalista con personalidad y color?
Más minimalista.
¿Algún arquitecto que te haya marcado por su diseño?
Un arquitecto que me encanta es Norman Foster, realmente para mí él es un genio. Yo he tenido el privilegio de trabajar con él y de ver varias de sus obras y pues para mí él es mejor del momento.
