Después de ser galardonado con numerosos premios por todo el mundo, Erik Lorincz se ha convertido en uno de los bartenders más famosos y aclamados. En todos los bares en los que ha trabajado, ha llevado a la cima su estilo único en bebidas y su pasión por explorar lo desconocido. En el marco de los prestigiosos y esperados premios World ́s 50 Best Bars que reconocen a los mejores bares y cocteles del planeta, platicamos con el representante de Ron Matusalem en el evento, sobre su trayectoria y su proceso creativo a la hora de elaborar nuevos cocteles.
¿Cuál dirías que fue la inspiración que encontraste en el libro sobre bartending de Roman Uhlir?
El libro fue lo mejor que pude encontrar para comenzar mi viaje dentro del mundo del bartending. Es una composición detallada de la mayoría de los cocteles clásicos que todo barman debería saber.
¿Cómo crees que tus raíces eslovacas influyen tu trabajo? ¿Crees que eso es parte de lo que te hace único como mixólogo?
No estoy seguro que haya ahorita alguna influencia en ser eslovaco como tampoco en aquel entonces; cuando empecé no había bares de cocteles en Eslovaquia. Yo solamente era una persona muy trabajadora con un sueño que se convirtió en realidad.
¿Qué fue lo más importante que aprendiste sobre esta línea de trabajo en el Savoy, en Londres?
El Savoy en particular fue un gran aprendizaje para enfocarme puramente en el huésped. La mayoría de las veces olvidamos que el invitado no viene a nuestro bar porque tenemos algunos bitters nuevos o algún coctel con ingredientes locos, solo quieren tener una buena experiencia y nuestra misión era leer al cliente y asegurarnos de satisfacer sus necesidades.
¿Por qué te apasiona la cultura japonesa?
Me gusta la sencillez y la atención al detalle. La forma de pensar y respetar no solo a los demás, sino la manera de hacer las cosas con mucha lógica.
¿Cuál dirías que es el “conocimiento necesario” para alguien que quiere seguir una carrera de bartender o mixología?
Comprender que la coctelería es hacer, crear, servir y ejecutar bebidas. En este caso, el bartender tiene que aprender a combinar sabores que armonicen, así como técnicas que funcionen para crear sabores y también saber cómo vender estas bebidas a un invitado y ejecutarlas bajo presión independientemente de si el bar está lleno o vacío.
Cuéntanos sobre tu proceso creativo. ¿Cómo se crea una nueva bebida?
Primero, miro el ingrediente base con el que quiero trabajar, gin, vodka o ron; luego tomo la dirección a la que quiero ir, si esta bebida es corta y aguda o larga y suave. Y finalmente, elijo el segundo ingrediente que sería el que apoya y resalta todos los otros sabores.
¿Qué significan para ti los premios como Bartender Internacional del Año 2018 o alcanzar la posición número 1 en el World 50 Best Bars, cuando estabas en el Savoy?
Los premios son excelentes para complacer al ego, pero tenemos que ser honestos en que nada viene gratis en la vida. Detrás de cada trofeo hay un trabajo duro, noches de insomnio, madrugadas, vuelos largos y muchas horas detrás de la barra del bar. Por lo tanto, creo que cada premio debe verse como un “bien hecho” para ti mismo.
Cuéntanos sobre esta aventura con Matusalem. ¿Por qué crees que haces tan buena conexión con la marca?
Me gusta la historia y la pasión de la familia, lucharon por sobrevivir y tuvieron que abandonar su propio país. De la misma manera, yo también salí de mi propio país para luchar y conseguir ser un mejor barman. Llegué a Londres sin una palabra de inglés y tuve que empezar desde abajo. Cuando alguien construye una marca de la nada y la mantiene dentro de la familia se gana todo mi respeto, ¡y Matusalem lo hizo!
¿Cuál ha sido tu creación más especial?
Siento que cada bebida que hago tiene algún apego a una ocasión, ubicación o historia que es especial e importante para mí.
¿Cuál es tu bebida favorita?
Definitivamente, la que está en mi vaso. En Nueva Orleans era un Sazerac; en Cuba un Daiquirí; en Tokio un Martini seco y en la barra de Three Sheets, en Londres, un Cosmopolitan.
Compártenos la receta de una bebida que hayas hecho especialmente para Matusalem.
Esta bebida la servimos en el décimo aniversario de los 50 Best Bars.
SANTIAGO
50 ml de Matusalem Grand
Reserva filtrado a través de un café
30 ml de agua de coco 10 ml de PX Sherry
Adornado con viruta de coco en escabeche.
Texto realizado en colaboración con Ron Matusalem
