El nombre de una marca es su activo más valioso, pues define su identidad en el mercado. Empresas como Starbucks o Google no solo son reconocidas por sus servicios, sino por el branding que las diferencia en un mundo competitivo. El logo complementa el nombre: es un signo o símbolo que conecta con los consumidores y, sobre todo, representa la confianza. Conforme el mercado cambia, las empresas también. Por eso, a continuación te compartimos un poco de la historia de los logos y una lista con la sorprendente evolución de aquellos de algunas de las marcas más famosas.
Las primeras versiones de logos se remontan en la antigua Edad Media. Las tiendas y pubs utilizaban letreros para comunicar lo que vendían y los servicios que ofrecían. Los primeros diseños modernos se crearon a principios del siglo XX y evolucionaron junto con la impresión en masa.
Tras la Revolución Industrial, los cambios en la estructura de la imprenta y su nuevo diseño impulsado por vapor permitieron la producción en masa de materiales impresos. La cromolitografía, por ejemplo, permitió la impresión en color en masa por primera vez en 1840, en Estados Unidos. Es decir, la publicidad revolucionó gracias a las etiquetas, anuncios y carteles impresos a color que, poco a poco, se convirtieron en algo común.
Entre 1910 y 1915, los logotipos comerciales se convirtieron en algo común en Europa y Estados Unidos. A continuación te compartimos cómo cambiaron los logos de algunas de las marcas más conocidas a nivel mundial a lo largo de los años.
Apple (27 años)
Microsoft (28 años)
Twitter (17 años)
Amazon (29 años)
Nintendo (134 años)
Disney (100 años)
Netflix (26 años)
Facebook (19 años)
Google (25 años)
Tesla (20 años)
MTV (43 años)
Nike (24 años)
Coca Cola (137 años)
Adidas (74 años)
Starbucks (52 años)
Instagram (13 años)