La Posta Vecchia, fue alguna vez la residencia privada del empresario petrolero John Paul Getty, cuya colección de antigüedades, tapices y viejas reliquias aún permanece en la casa, y ahora forma parte de un hotel de lujo de 19 habitaciones.
La Villa original se construyó por el Príncipe Orsini en 1640 en las ruinas de una Antigua cuidad romana llamada Alsium. La familia Orsini, a quienes pertenecía el Castillo vecino, requería de un lugar para hospedar a los amigos de la familia, quienes solían visitar frecuentemente. Sin embargo, el lugar rápidamente se convirtió en un lugar de reunión para otros viajeros que pasaban por ahí en su ruta a caballo por el camino hacia la ciudad. La Posta Vecchia mantuvo su función como albergue para viajeros hasta bien entrado el siglo XX, cuando en 1918 dejó de funcionar de tal manera. En 1693 la residencia fue vendida por la familia Orsini a otra familia aristocrática; el edificio siguió siendo una residencia privada a la vez que un albergue. En 1960 fue comprada por el empresario norteamericano Jean Paul Getty, quien se dio a la tarea de restaurarla para regresarla a su antiguo esplendor. Además de la meticulosa restauración, Getty fue añadiendo muebles, objetos y arte adquiridos de distintas casas reales de alrededor del mundo. Durante la restauración, las ruinas de una milenaria villa romana fueron descubiertas, y ahora forman parte del pequeño museo arqueológico que es parte del hotel.
Cada uno de los 19 cuartos de La Posta Vecchia lleva el nombre de un huésped ilustre que se hospedó ahí desde el siglo XVII en adelante. Las habitaciones están decoradas exclusivamente con antigüedades y obras de arte que pueden ser consideradas piezas de museo. Todas las Master Suites, Senior Suites y Junior Suites, ofrecen impresionantes vistas al mar o a los impecables jardines del hotel, mientras que las habitaciones Torre cuentan con vistas de altura que dominan el horizonte en todas direcciones.
Restaurante The Cesar:
Este afamado restaurante es de un ambiente refinado y elegante, sus codiciadas mesas de terraza y su refinado menú de comida regional, dejaron de ser un secre-to hace mucho tiempo. Desde que el chef Michele Gioia se hizo cargo del restaurante, se dio a la tarea de crear un nuevo menú para darle una nueva personalidad al restaurante; a través de su talento y su refinado gusto, Michele Goia ha transformado The Cesar haciéndolo acreedor a la importante distinción “1 diamante Michelin” otorgado por la prestigiosa Guía Michelin. Desde entonces, The Cesar se ha vuelto un favorito de la región, y no es extraño que los habitantes de Roma manejen hasta cuarenta minutos para sentarse en The Cesar, a degustar uno de los exquisitos platillos diseñados por Michele Goia; tampoco es extraño que los tripulantes de yates privados y pequeños cruceros desembarquen en Civitavecchia para disfrutar de algún platillo en este restaurante.
Relajación y bienestar:
Absorber los rayos de un conmovedor atardecer sobre el mar azul con un cóctel en la mano, es para muchos huéspedes una actividad prioritaria. Los huéspedes de La Posta Vecchia, pueden elegir entre la alberca cubierta con calefacción y sus impactantes vistas del horizonte o la playa privada donde el mar Tirreno se extiende frente a ellos como una alberca privada.
Los extensos e impactantes jardines, ofrecen muchos recovecos escondidos y tranquilos para explorar o para sentarse a disfrutar de un buen libro. Para los huéspedes que deseen realizar actividades más vigorosas el hotel ofrece canchas de tenis, un campo de golf cercano y la posibilidad de practicar equitación. las bicicletas que están a disponibilidad de los huéspedes permiten realizar amenos recorridos por los caminos.
También se organizan paseos en barco y transportación marítima a los diferentes lugares de interés alrededor del hotel. Otra posibilidad es la de recorrer a través de paseos organizados por el hotel, las diferentes ruinas etruscas que existen en las cercanías.
La posta Vecchia fue construido sobre los restos de una antigua villa romana que formaba parte del puerto de Alsium, un lugar de descanso y de veraneo de la élite romana. Durante los trabajos de restauración emprendidos por John Paul Getty, tras adquirir La Posta Vecchia, fueron desenterrados mosaicos y otros artefactos romanos del sitio; Getty quien era un hombre culto e interesado por la historia, decidió construir un museo privado para albergar los objetos. Hoy en día este museo está abierto para los huespedes. El museo que se encuentra en los terrenos del hotel, cuenta con una interesante colección de artefactos, entre los que destácan lámparas y vasijas así como con las ruinas de una cisterna, un patio, jardines y un pasaje que llevaba al domo central de la antigua villa, todas las construcciones datan del siglo 1 d.C.
HOTEL LA POSTA VECCHIA
Palo Laziale – 00055 Ladispoli (RM)
T (+39) 06 9949501
F(+39) 06 9949507