Rías Baixas es una pequeña zona vitivinícola ubicada al noroeste de España, en una región conocida como Galicia. Uno de los factores determinantes de la extraordinaria calidad de su vino, es la apuesta por las variedades autóctonas, sobre todo la albariño que representa más del 97% de la producción. Además, nos encontramos con otras variedades autorizadas de uva como Loureira blanca, treixadura, caíño blanco, torrontés y godello.
Tuvimos oportunidad de hablar con Ramón Huidobro, embajador de la marca, para contar los secretos de esta región.
1. ¿Cómo es que comienza la historia de Rías Do Baixas?
La historia parte del trabajo de preservación de la variedad albariño que se hizo en los monasterios y en la provincia de Pontevedra. El trabajo como denominación protegida comienza siendo la Denominación Específica Albariño en el año 1980. Cuando España se incorpora a la Unión Europea, ésta le dice que las Denominaciones de Origen no pueden contener nombres de variedades de uva (dado que son nombre universales) y, por tanto, hay que buscar un nombre geográfico que la caracterice, y se piensa en Rías Baixas como el lugar geográfico donde se asiente, en un primer momento, la viticultura de nuestra Denominación de Origen.
Sobre estas bases, nace en el año 1988 la Denominación de Origen Rías Baixas que hoy conocemos. En un primer momento, la denominación de origen contaba con 14 bodegas (repartidas en estas 3 áreas geográficas o subzonas), con 492 viticultores y 237 hectáreas y produjo poco más de 700.000 litros de vino.
2. ¿Cuántas bodegas son ahora las que tienen esta denominación?
En la actualidad, la D.O. Rías Baixas cuenta con 183 bodegas, 4.079 hectáreas y 5.806 viticultores. Curiosamente, Rías Baixas es una de las denominaciones españolas más grandes en cuanto a número de viticultores y bodegas, pero de las más pequeñas en cuanto a superficie inscrita.
3. ¿Cuáles son las principales características o pasos para obtener esta denominación?
En una denominación de origen debe existir una vinculación de la tierra (vínculo territorial), con la cultura del vino. En el caso de Rías Baixas ese nexo queda patente no solo por su tradición, sino también por su apuesta por las variedades autóctonas. Éstas son las que mejor se adaptan a nuestra climatología atlántica, con unos inviernos de temperatura suave y lluviosa, unas primaveras precoces y lluviosas, así como unos veranos suaves y secos.
Precisamente, estas variedades autóctonas resistentes a la humedad, en especial la albariño, confieren a nuestros vinos una gran personalidad, con una acidez equilibrada y una muy buena persistencia en boca.
4. ¿Cómo describirías el consumo del vino blanco en el mundo?
El consumo del vino blanco crece en todo el mundo, el blanco es mayoritario. Las razones son económicas, gastronómicas y climatológicas. Por un lado, la calidad y la diversidad de estos vinos ha mejorado mucho. Por otro, los vinos blancos tienen una gran versatilidad gastronómica en un momento en el que la gastronomía se aligera y apuesta por los pescados y maridajes crudos. Pongo, como ejemplo, el perfecto maridaje de los vinos de Rías Baixas con la cocina mexicana o la comida asiática.
5. ¿Cuáles dirías que son los principales lugares en el mundo para degustar el mejor vino blanco?
Hoy encontramos magníficos vinos blancos por todo el mundo. Pero si tuviera que elegir un país, yo diría que actualmente España es el mejor lugar para degustar un buen vino relación calidad precio. Y, por supuesto, los vinos de Rías Baixas son los mejores candidatos en cuanto a vinos blancos.
6. ¿Cómo ves al consumidor mexicano?
Yo destacaría que existe una gran aceptación e interés por parte un público joven y dinámico hacia el vino, lo que me parece muy positivo.
En general, en los países no consumidores de vino (como Reino Unido, o México) el consumo se incrementa a medida que los ciudadanos toman conciencia de que el vino es un alimento, que tiene propiedades saludables y que sienta mejor que otras bebidas.
Creo que todavía hay muchas cosas que cambiar y enseñar a los consumidores mexicanos sobre el vino. Todo ello sumado a que la producción de vino mexicano aún es pequeña.
7. ¿Qué puedes decir de la producción del vino blanco en México?
De momento la producción del vino en México es pequeña, así como su consumo per capita. Ambos no paran de crecer, pero lógicamente necesitan recorrido.
8. Para ti, ¿cuáles son los principales aspectos que un buen sommelier de vino blanco tiene que distinguir?
Debe ser un profesional multifacético. Por una parte tiene que gestionar la bodega y elaborar la carta de vinos, luego saber orientar y aconsejar al cliente. Aquí entra en juego la psicología, el conocimiento de los platos del restaurante y sus posibles maridajes. También es importante el servicio del vino, tanto en general como en particular. Me refiero a escoger la temperatura adecuada de cada vino, si hay que decantarlo, el tipo de copa… En este tipo de profesionales la formación continua es fundamental, así como su pasión por la cultura del vino.
9. Recomendaciones para alguien que visita por primera vez visita Rías Baixas
Rías Baixas es un todo. El verdor de su paisaje, sus rías, su magnífica gastronomía y la amabilidad y cercanía de sus gentes. En las Rías Baixas encontrarás la perfecta combinación entre la tradición y modernidad e innovación.
Si hablamos de paisajes, destacaría sus rías, sus ríos, sus pazos, casas solariegas que acogen a preciosas bodegas que cuentan con las últimas tecnologías. También llama la atención que el terreno está repartido en multitud de pequeñas parcelas con viñedos, un fenómeno conocido como minifundismo.
En cuanto a su gastronomía, destacaría sus magníficos pescados y mariscos, procedentes de las Rías Baixas. También los productos de su huerta y sus excelentes carnes y quesos de vaca, una gastronomía atlántica que marida a la perfección con nuestros vinos.
Y, para terminar, recomendaría adentrarse en las tradiciones y toda la historia que rodea a nuestra tierra.
10. El maridaje perfecto para ti sería
Dentro de la cocina mexicana uno de los mejores maridajes sería con los ceviches estilo sinaloense, el chilpachole de jaiba, o un chilmole con pavo.