Bajo el son de las olas que revientan en las costas de Nayarit, encontramos un pequeño pueblo que, rodeado por kilómetros y kilómetros de selva y mar, aloja a surfistas y bon-vivants: Sayulita.
Puede que las playas californianas o las de Hawaii coronen la lista de los destinos más visitados para realizar este deporte acuático, más este paraíso marítimo se ha convertido en un pequeño oasis con sabor mexicano, para una nueva generación de surfistas por pasión y vocación.
En esta ocasión, Sayulita hosteará el Sayulita Wine Festival: una plataforma para exhibir a las mejores casas vinateras del país. El evento busca convertirse en un festival que celebra la gastronomía local, para terminar con un festejo tanto cultural como artístico. Gisela Marín y el chef del Bistro Orgánico, Calixto Gattas, tuvieron la idea de llevar la cultura gastronómica y vinatera de la región a un nivel más alto para los amantes de estos dos artes. El evento se llevará a cabo en una propiedad en Sayulita, la cual dispondrá de las mejores vistas al mar de toda esta localidad.
Además, el Hotel Cielo Rojo, el Bistro Orgánico y Haramara Retreat & Imanta servirán como base para llevar a cabo una serie de eventosdurante los días del festival. Entre los eventos más destacados, además de las catas, estará la subasta silenciosa en la que los invitados al evento podrán hacer apuestas para ganar botellas poco comunes en el mercado.
Durante el festival, podrás disfrutar de diversas presentaciones de chefs de talla internacional invitados especialmente al evento y de una amplia gama de vinos. Al evento atenderán muchas de las casas vinateras más conocidas del país. Entre ellas se encontrarán Monte Xanic de Valle de Guadalupe, Sea Smoke de Santa Bárbara, California, Villa Montefiori de Valle de Guadalupe y Vinícola Fraternidad de Valle de Guadalupe. Este evento buscará convertirse en un festival que marque tendencias en la cocina y en la cultura de los vinos en México; será el centro para explotar el potencial de las empresas emergentes en la industria del vino a nivel internacional.
Otra de las empresas que pondrásu huella dentro del festival, serála marca de joyería en mexicana Kalosoma. El espíritu de esta marca, al igual que la de los vinos, logra mezclar el ADN mexicano con las tendencias de calidad y diseño a nivel global. La diseñadora y creativa de la marca, Claudia Fernandez, inspira sus diseños en lo que su abuelo, un entomólogo español, le enseño durante sus paseos por el bosque en su infancia: lo que se ve claramente reflejado en el símbolo distintivo de la marca, un escarabajo. En esta edición del festival, Kalosoma abriráun pop-up store donde los asistentes al Sayulita Wine Festival también podrán comprar de las piezas únicas y artesanales que la marca confecciona.
Este evento pondrá a dichas empresas mexicanas en el ojo de la industria global, en un evento que mezclará lo mejor de la gastronomía, el arte y el diseño del país.
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