Hoy es un día importante para la astronomía, pues se logró captar la primera imagen en la historia de un agujero negro, que aparece rodeado por un anillo de luz brillante. La fotografía fue tomada por el Event Horizon Telescope (EHT), un proyecto colaborativo que combina el poder de ocho radiotelescopios colocados en distintos lugares del mundo. En esta iniciativa participaron cerca de 200 científicos internacionales, incluyendo algunos de la Universidad Autónoma de México (UNAM).
Un agujero negro es un astro con un campo gravitatorio muy potente, de modo que ningún elemento puede escapar de él, ni siquiera la luz. Por ello, los hoyos negros crecen constantemente y succionan los astros que se encuentran a su alrededor, los cuales ya no pueden regresar al universo exterior.
El hoyo negro fotografiado fue detectado en el corazón de una galaxia distante, a unos 300 millones de kilómetros de nuestro planeta. Se trata de un fenómeno supermasivo, pues se estima que el diámetro de este agujero es de 40 000 millones de kilómetros, por lo que es aproximadamente tres millones de veces más grande que la Tierra.
Esta imagen confirma la existencia de estos sorprendentes astros, que fueron predichos por Albert Einstein en su teoría de la relatividad, pero que, hasta la fecha, habían sido invisibles para el ojo humano.
Sin duda, haber capturado una imagen de este “monstruo”, como lo han descrito los científicos, es una hazaña digna de recordar y marca el comienzo de una nueva era para la astronomía. “Este es un momento histórico. Transformará nuestra comprensión de los agujeros negros”, declaró la astrofísica France Córdova, directora de la Fundación Nacional de Ciencia de Estados Unidos.
Escrito por Sofía Gutiérrez