El paraíso encontrado
Cualquier idea que podamos albergar en nuestra mente sobre una escena en el paraíso, sería insuficiente para describir la desbordante belleza de estas islas: colores que se saturan y parecen electrizados, aguas de un turquesa casi irreal, arenas blanco marfil, el verde de su vegetación tropical, y los dorados y naranjas de sus atardeceres. Todo ello crea escenarios que conmueven hasta el asombro, y dejan en el espectador una sensación de profunda calma y admiración ante la magnificencia con la que la Madre Naturaleza se expresa en estas remotas islas.
Desde jugar golf, practicar buceo, yoga y retiros de meditación, Spa de alta gama, senderismo, paseos en bicicleta, mercados típicos, restaurantes de primera, navegación y deportes náuticos, en Seychelles hay de todo y para todas las edades, para disfrutar de una estancia inolvidable. Y es que la combinación entre su exuberante belleza natural, en el anonimato de las playas privadas e islas desiertas que se pueden visitar, y el bullicio del centro de Victoria, con sus restaurantes, bares, mercados y tiendas, permiten al viajero alternar casi entre dos mundos.
De esta manera, es un destino ideal tanto para discretos “lunamieleros”, como para familias o grupos de amigos que buscan descansar en un lugar colmado de belleza, confort y seguridad.
Las Seychelles son también llamadas las Galápagos del Océano Índico por su aislamiento del continente y su extraordinaria riqueza natural. Este archipiélago está compuesto por 115 islas de las cuales solo 33 están habitadas, aunque, en muchos casos, se pueden visitar las no habitadas y conocer sus playas desiertas. El 80% de la población total se concentra en la capital, Victoria, localizada en la isla de Mahé. La población actual seychellense son inmigrantes de ascendencia francesa, africana, india y china que forjaron su cultura integrando matices muy diversos, aportados por una historia de navegantes europeos, asiáticos y africanos que pasaron por las islas. La música folclórica de los isleños es un vivo testimonio de ello, fusionando ritmos africanos, polinesios, indios y europeos.
Sin duda, las playas son la principal atracción de las islas, muchas de ellas, consideradas como las más bellas del planeta. Por algo son de los lugares favoritos de muchas celebridades de Hollywood para descansar. Entre las más visitadas y fotografiadas están Anse Source d’Argent, Anse Marron, en la isla de La Digue; Anse Takamaka, en la isla de Mahé y Anse Lazio en la isla de Praslin.
Las opciones para los amantes de la naturaleza son incontables. Las islas contienen una enorme biodiversidad, con numerosas especies endémicas de plantas y animales. Se destacan las tortugas gigantes, muy parecidas a las de las islas Galápagos, el tiburón ballena y las ranas más pequeñas del mundo, de un centímetro de longitud.
Estando en Seychelles es indispensable visitar el mercado de Victoria que destaca por su colorido, artesanía local, variedad de especias y pesca. Así mismo, se recomienda no dejar de ir a la Torre del Reloj que es uno de los edificios históricos más visitados y fotografiados de Victoria.
En el Jardín Botánico de Victoria, se puede apreciar gran variedad de aves y otros animales, entre los que destacan las ya mencionadas tortugas gigantes. También se pueden ver las palmeras que producen los famosos coc de mer, unos cocos con una forma muy exótica que asemeja la cadera femenina y que llegan a pesar hasta 8 kilos.
Visitar el Parque Nacional Morne Seychellois, que ocupa el 20% de la superficie de la isla de Mahé, es rodearse de bosques de manglares, en donde se puede hacer senderismo y admirar gran variedad de especies de aves como la paloma azul, el bul bul, el swiflet, y de reptiles como la víbora ciega, lagartos y lagartijas.
También se encuentra el Vallé de Mai, un parque declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, en la isla de Praslin, donde prolifera el exótico coc de mer. Es hogar de varias especies de aves endémicas como el loro negro.
Una de las grandes recomendaciones al visitar este destino es hacer snorkling y buceo. Las islas Seychelles están formadas por una gran barrera de coral (muchas de sus islas incluso son totalmente de coral). De ahí la finura de sus arenas que dan el blanco a sus playas y la razón de su abundante fauna y flora marina. Hay muchas excursiones para buzos que cuentan con su certificado PADI o también se pueden tomar clases para obtener la certificación.
Su pasado colonial, francés e inglés, se ve claramente reflejado en la arquitectura de suntuosas mansiones que los terratenientes europeos construyeron y que aún sobresalen dentro del paisaje urbano de la capital.
El evento más destacado es su carnaval internacional, que durante tres días engalana las calles de Victoria e invita a participar a los representantes de carnavales más destacados del mundo, como los de Río y Nueva Orleans.
GUÍA DE SEYCHELLES
DÓNDE COMER
Zez
D. Petit Anse, Baie Lazare
T. + 1 248 439 3000
Curieuse Restaurant
D. AnseTakamaka, Baie Sainte Anne
T. +1 248 429 6000
Marie Antoinette
D. Serret Rd
T. +248 426 6222
DÓNDE DORMIR
Four Seasons Seychelles
D. Petit Anse, Baie Lazare
T. +1 248 439 3000
Raffles Praslin
D. AnseTakamaka, Baie Sainte Anne
T. +1 248 429 6000
Freegate Island Private, Oetker Collection
D. Freegate Island Private, Victoria
T. +1 248 467 0100
North Island – My Private Villas
D. 28 Weir Road, Londres
T. +44 208672 7040
CRUCEROS
Esta también es una buena opción para visitar las islas. Algunas de las navieras más lujosas incluyen, dentro de sus itinerarios, tocar puerto en Mahé.
CÓMO LLEGAR
Volando por Air France, vía París, o por Emirates, desde México vía Dallas, Houston, Los Ángeles o NuevaYork.
CUÁNDO VIAJAR
El clima es tropical con temperaturas entre los 25° C y 30° C todo el año. La temporada de lluvias inicia en noviembre y culmina en mayo.