1. Todos los ojos en el Estado de México
Aunque las elecciones se llevaron a cabo en 4 estados diferentes (Estado de México, Nayarit, Coahuila y Veracruz), todas las miradas se centraron en el Estado de México, pues es el más poblado del país (con más de 11 millones de personas llamadas a votar), y en ese sentido era un buen termómetro para las elecciones presidenciales del próximo año. Para el PRI era súper importante, como en los últimos 88 años, conservar la victoria en este estado que ha visto pasar a gobernantes como el mismo presidente Enrique Peña Nieto. Para Morena, en cambio, era importante demostrar que el partido y su presidente, Andrés Manuel López Obrador vienen con más fuerza que nunca, pues recordemos que este último aspirará una vez más a la presidencia este 2018.
2. Los resultados
Al final, y hasta el día jueves en que el Instituto Electoral del Estado de México (IEEM) terminó de contar el 99.5% de los votos distritales, se confirmaron los resultados que había arrojado el Conteo Rápido y el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) en un comienzo. El ganador fue el abanderado del PRI, Alfredo del Mazo, con el 33.71% de los votos, seguido por la candidata de Morena, Delfina Gómez, con el 30.87% de los votos. En tercer y cuarto lugar quedaron Juan Zepeda del PRD y la excandidata presidencial del PAN, Josefina Vázquez Mota, quien desde un principio reconoció que las tendencias no le favorecían (pues sí, ¿no?).
3. “Voto por voto”
Como si del 2006 se tratara, en cuanto se supieron los primeros resultados del Conteo Rápido y del PREP colocando a Del Mazo por delante de Gómez, Andrés Manuel salió a desempolvar su famosa frase “voto por voto, casilla por casilla” pidiendo el recuento de los 5.7 millones de votos emitidos y pidiéndole al presidente Peña Nieto que dejara de intervenir en las elecciones del Estado. Aseguró que no permitirían que “surgiera alguien del fraude electoral” y que estarían dispuestos a llegar hasta el tribunal federal electoral para impedirlo. Al final, el IEEM sólo encontró causas específicas que permiten el recuento en 3,261 de las 18 mil casillas que el partido buscaba computar, por lo que los resultados finales difícilmente cambiarán. Aún así, el comportamiento de Morena sigue siendo comprensible, pues aceptar fácilmente una derrota los hubiera dejado mal parados para después.
4. ¿Y el PAN?
Aunque hace un año el panorama pintaba muy favorecedor para el partido después de que lograran ganar 7 de las 12 gobernaturas que se disputaban, este año parece que todo se ha revertido. A pesar de haber ganado Nayarit en una alianza con el PRD, el cuarto lugar de Josefina en el Estado de México coloca al partido y a su presidente Ricardo Anaya muy atrás en la carrera presidencial del próximo año. Margarita Zavala, esposa del expresidente Felipe Calderón salió rápidamente a responsabilizarlo de la derrota y a decir que había sacrificado las posibilidades de éxito del partido a cambio del interés propio. Normal, pues recordemos que ella junto con el exgobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, compiten con Anaya por la nominación del partido.
5. De los demás estados
El mayor golpe para el PRI fue en Nayarit y en Veracruz pues en el primer estado, Antonio Echeverría García de la “Coalición Juntos por Ti” formada por el PAN, PRD, PT y el PRS logró superar a su abanderado Humberto Cota Jiménez, y en Veracruz la alianza PAN-PRD se logró quedar con la mayoría de municipios que en algún momento pertenecieron al PRI. En Coahuila, al igual que en el Estado de México, el final de la carrera quedó tan cerca entre los dos punteros que aún no se tienen resultados oficiales. La contienda cerró entre el priista Miguel Riquelme y el panista Guillermo Anaya. Sin duda, las esperanzas del PAN se centran ahora en este estado pues aunque Riquelme llevaba la delantera con un 1.6% de los votos, los panistas creen que hay elementos suficientes para que el tribunal electoral invalide la elección. Esta historia continuará…