En la colonia Roma, una casa particular se ha convertido en punto de encuentro entre el arte, la moda y la comunidad. A un año de su apertura, Golden Goose HAUS Ciudad de México celebró su primer aniversario con una noche dedicada a la creatividad compartida.
La fachada fue el primer lienzo. Rocca Luis César presentó una obra inédita creada en colaboración con Golden Goose: una composición vibrante que fusiona lo humano y lo celestial a través de líneas fluidas y colores intensos. Su mural reafirmó el espíritu de intercambio que define a este espacio. Cada año, la marca invita a un artista mexicano a transformar sus muros exteriores, haciendo de ellos un homenaje vivo a la creatividad local.
En el interior, la energía se desplazó hacia el Patio, donde los Dream Makers (artesanos de la marca) guiaron experiencias de personalización y serigrafía artesanal. Bajo una atmósfera de curiosidad y juego, los asistentes pudieron intervenir prendas, accesorios y crear bandanas únicas inspiradas en los sellos y motivos de la obra de Rocca.
Entre viniles seleccionados por La Roma Records, cocteles artesanales de Bar Mauro, dulces y picantes creaciones de Xile.Chile, y bocadillos de Lardo, la experiencia se desplegó en cada habitación de esta casa que respira historias. Lo doméstico se transformó en galería, lo cotidiano en ritual. Cuando el piano bar retro El Ayer improvisó una versión coral de Las Mañanitas, la celebración se volvió un retrato perfecto del espíritu de HAUS: espontáneo, íntimo y profundamente humano.
HAUS CDMX representa la expansión del universo Golden Goose hacia un terreno de intercambio cultural. Desde su inauguración en 2024, este lugar ha reunido a artistas, diseñadores y comunidades creativas en torno a un mismo lenguaje: el del arte hecho a mano.
Como cierre simbólico, Rocca Luis César regresará al Golden Goose HAUS para abrir un nuevo capítulo de esta conversación: una jornada pública de co-creación donde los visitantes podrán personalizar piezas con su sello artístico. En ese gesto, tan artesanal como emocional, se condensa la esencia de Golden Goose: una marca que celebra lo imperfectamente perfecto, que encuentra en la huella humana su forma más pura de belleza.
