Una talentosa mujer que ha puesto en alto el nombre de nuestro país gracias a su destacada carrera como directora de orquesta. Ha sido parte de las orquestas más importantes del mundo y ha dejado huella en cada proyecto en el que participa. Alondra de la Parra fue la primera mexicana en dirigir en Nueva York, un orgullo nacional gracias a su vibrante pasión y sus espectaculares interpretaciones musicales.
Alondra nació en Nueva York el 31 de octubre de 1980, y con apenas dos años de edad, su familia se mudó a México. Desde muy temprana edad, dejó ver su pasión por la música y los instrumentos, y a los siete años, comenzó a tocar el piano. Pocos años después, adquirió gusto por el chelo. Más tarde decidió estudiar composición en el Centro de Investigación y Estudios Musicales de México. A la edad de 19 regresó a vivir a Nueva York para estudiar en la Manhattan School of Music, donde obtuvo la licenciatura en Piano y una Maestría en Dirección Orquestal, ambas con honores.
A los 23 años, de la Parra fundó en Nueva York la Orquesta Filarmónica de las Américas (POA), con el fin de crear una plataforma para promover y apoyar a los jóvenes compositores amantes de la música. Además, implementó un programa de educación para los niños de escuelas públicas en Nueva York y, durante sus giras, también apoyó a los niños de México: en Oaxaca a la Banda Sinfónica Infantil de Benito Juárez, y en Guerrero, dirigió una clínica de la Orquesta Renacimiento.
Alondra grabó su primer álbum bajo el título de Mi alma mexicana con la Orquesta Filarmónica de las Américas, bajo el sello Sony, en 2010, el cual rompió récords en México, situándose en la posición número uno en música clásica y la número dos en la lista Amprofon. Ha sido Embajadora Cultural Oficial de México y, en 2010, recorrió muchas ciudades de nuestro país en su gira “Bicentenario”. El mismo año, recibió el Premio Antena CRIT al Mérito Artístico.
Alondra de la Parra ha pertenecido a las orquestas de Jalisco, Sinaloa, Aguascalientes, Xalapa, la Sinfónica del Estado de México y la Orquesta Sinfónica Nacional en el Palacio de Bellas Artes. También ha sido parte de sinfónicas en todo el mundo: la de Buenos Aires, la Sinfónica de Sao Paulo, la Filarmónica de Montevideo, y la Orquesta Juvenil de Venezuela, además ha formado parte de la Orquesta de Houtson, San Francisco, Columbus, San Antonio, Dallas, la Orquesta del Nuevo Mundo de Miami, la Orquesta de Cámara de Los Ángeles, la Sinfónica de Edmonton, la Orquesta del Festival Moritzburg en Alemania, la Tivoli de Dinamarca y la Sociedad Filarmónica de Madrid Berlín, entre otras.
Se convirtió en la primera mujer en la dirección musical de la Orquesta Sinfónica de Queensland en Australia, además de recibir un sinfín de premios, entre ellos la Figura del Año, por la Asociación Mexicana de Publicidad, el Culture Award, por American Business Council y el National Arts Award por la Fundacion Sarquís Merrewe. Alondra es, sin duda, una mujer que ha logrado convertir su sueño en vocación, con alma mexicana y comprometida con su país, ha ayudado a cumplir los sueños de los que, como ella, aman la música.
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