La noche del 25 de julio las papilas gustativas de los invitados de Gastromotiva México se llenaron de expectativas. En la Fonda Fina, lugar donde se llevó a cabo la cena preparada por los chicos acogidos por la fundación, se compartió un ambiente de esperanza, alegría y buen apetito.
Gastromotiva es una asociación civil internacional que busca transformar la vida de las personas a través de la gastronomía. Salvaguardan a chicos y chicas en situación de vulnerabilidad para capacitarlos e integrarlos a la cocina de diferentes restaurantes del mundo.
A pesar de que la iniciativa comenzó en las favelas de Brasil hace diez años como una herramienta para promover la educación, el empleo y la generación de empleos, en México ha crecido a través de diferentes restaurantes como Fonda Fina, Ánima y La Panga. Juan Cabrera y Antonio De Livier, dos de los Chefs mexicanos que han promovido Gastromotiva, fueron los líderes gastronómicos de la velada.
Antes de tener el gusto de probar los diferentes platillos ofrecidos en la cena, los invitados fueron recibidos con dos opciones de cocteles: uno de mezcal Montelobos con chicozapote e higo o una bebida integrada con piña tostada, ron Ancho Reyes, limón y escarchado de jamaica.
El abreboca consistió en varias almejas reyna rellenas de tuétano y panko para botanear. Seguido de estos sabores, se sirvieron unas pequeñas tortas de chilaquiles y pulpo de chileajo. Estos dos primeros fueron acompañados de la fresca cerveza artesanal —dorada u oscura— llamada Tempus.
Los ingredientes marinos continuaron con una birriamen de caldo picoso. Como cuarto plato los donadores disfrutaron de un tierno pescado en salsa verde y cueritos sobre una cama de hongos de lluvia y chiriva. Estos dos platillos fueron acompañados de Arrebato, un vino blanco mexicano chenin, Sauvignon y Combard.
Para abrir el abanico de sabores el quinto plato no era marino sino que incluyó picaña de res ahumada y enfrijolada, sobre puré de plátano y ejotes asados. Éste estuvo acompañado de vino tinto, también Arrebato, de la cosecha del 2015.
Para cerrar la noche, el postre fue muy peculiar: flan de aguacate con salsa de cerezas y helado de almendra. El manjar estuvo acompañado de un discurso final de los Chefs y las organizadoras Claudia Ramírez y Mónica Ducoing. Los chicos de la cocina se mostraron contentos, sabiendo que esos aplausos de los invitados significan que a través de Gastromotiva se les abrió un mundo de oportunidades gastronómicas.