Por: Alexis Mustri
Platicamos con el artista israelí, quien a través de su trabajo explora las barreras de la percepción humana y ha dado de qué hablar con su nuevo proyecto Mercer Labs el cual ha pasado seis años creandolo.
Roy nació y creció en Jerusalén. Recuerda que desde pequeño disfrutaba ver a su padre pintar. Primero estudió en la escuela nacional de arte de Israel (Academia de Artes y Diseño Bezalel) y posteriormente, en la prestigiosa universidad Cooper Union, en Nueva York. “Llegué a esta ciudad y ya nunca me fui”, nos cuenta. Desde entonces, reside en Soho, pero trabaja entre Estados Unidos e Italia.
En el 2012, llamó la atención con su trabajo “Blind”, en el que combina la pintura y su técnica de pixeles dentro del contexto del sistema braille para personas ciegas. “Aliento a las personas a tocar e interactuar con mi trabajo, siento que esto mantiene vivo a mi trabajo, a la vez que rompe con la barrera entre el espectador y el ‘objeto sagrado”, afirma. Hasta entonces, había estado utilizando la idea de los píxeles pintados uno por uno para crear micro mundos, los cuales se unen y forman el patrón de una realidad única.
Roy crea en paralelo el texto y la imagen pintada: “Los dos elementos representan los sentimientos internos que tengo hacia la pieza. Cuando cierro los ojos, puedo ver claramente la imagen que quiero pintar, es casi como un sueño. Después, creo la poesía, busco las palabras correctas que acompañen mis visiones, con la esperanza de que aquellos que son ciegos puedan percibir el sentido de cada obra”.
Describe su arte como revelador (“eye-opener”), pues piensa que detrás de cada trabajo hay mucho más allá de lo que puede ser visto. El braille se convierte así en una herramienta expresiva más: “El texto puede ser utilizado como un vehículo para permitir a mis espectadores explorar sus propios temores existenciales. Es una metáfora de la ceguera causada por los deseos y los valores desplazados”, afirma.
Junto con , Ciarra Pardo y Rihanna estuvo nominado para Mejor Presentación durante la 59 entrega de los Premios Grammy, en 2017, por el aclamado album “Anti”. El artista nos cuenta que fue la gente de la cantante quien se acercó a él: “Ella conoce mi trabajo y le gusta. Fue increíble trabajar con ella, es genial, tiene mucho talento, es muy interesante y muy amable”.
El proceso creativo
Roy trabaja entre 6 meses y en ocasiones hasta más de un año en una pieza. Como parte de su proceso creativo, elabora bocetos, escribe y medita. Su inspiración proviene de la vida misma y las memorias que tenemos de ella. Para él es muy importante que el arte sea auténtico: “La idea detrás del arte contemporáneo es que hay que ser diferente. En mi caso, las ideas me vienen en visiones o sueños y luego se necesita un proceso metafísico para convertirlas en algo real. Cada artista debería tener un proceso similar”. El arte ha sido su vida: “Yo no veo el arte como mi profesión, el arte es quien soy, y lo que creo. Es una herramienta para comunicarnos, yo me convierto en arte y el arte se convierte en mí, es parte de un proceso natural”.
Nace Mercer Labs: Artwork for all senses
Esté febrero abrió las puertas a Mercer labs New York museo el cual transporta a los visitantes al mundo de los sueños del artista. Examina los procesos mediante los cuales crea arte y experimenta con la tecnología. Es una institución experimental que desafía las convenciones y las expectativas. Donde la cultura y la innovación convergen con la intención y el arte humaniza la tecnología.
“Quiero que la gente toque el trabajo”, dice Nachum, explicando que los espectadores deberían sentirse libres en Mercer Labs. Una instalación llamada I See Sound exagera este concepto de sentir la obra de arte en lugar de verla. Se ofrecen máscaras para dormir y el espectador se convierte en oyente está invitado a reclinarse en la alfombra. Esta sala es “uno de los tres únicos sistemas de SONIDO 4D a gran escala del mundo”, ademas cuentan “una configuración avanzada de altavoces omnidireccionales y transductores vibroacústicos debajo del suelo.
Su misión es clara: ser un catalizador, interrumpiendo estos dos mundos para crear una plataforma que impulse la inspiración y la colaboración ubicado en Tribeca en 21 Dey Street con 36.000 pies cuadrados, la narrativa arquitectónica , alberga quince espacios de exposición en los que se llevan a cabo experimentos de arte utilizando la tecnología como lienzo en blanco. La experiencia en constante evolución te invita a explorar el mundo a través de otro punto de vista.
“New Nature es mi habitación favorita , dice Nachum. ‘ Es lo que veo cuando cierro los ojos .’ El espacio aparentemente infinito alberga un volumen de luces parecido a una nube. Se trata de una cuadrícula tridimensional de 507.000 neuronas-microchips LED sincronizadas. Estos vóxeles, o píxeles volumétricos, cambian y brillan constantemente para parecerse a figuras y patrones holográficos. Los espejos alrededor amplifican el efecto para crear una galaxia de infinitas partículas de luz suspendidas.
Entre las últimas salas, The Beach muestra un gran brazo robótico rodeado por un lecho de arena. El desempeño mecanizado del robot combina la inteligencia de la máquina y la imaginación humana, imitando tanto a los humanos como a la naturaleza mientras dibuja dibujos en la arena y los barre como la marea. Detrás de sus movimientos infantiles, el brazo robótico es una demostración de la relación en constante evolución entre los humanos y la automatización.
“Mercer Labs nace de una idea que se libera de las limitaciones de la práctica creativa y es ilimitada más allá de las limitaciones.El laboratorio de Mercer Labs está en el centro de la visión. El laboratorio facilita un intercambio continuo entre artistas, ingenieros, matemáticos y creativos que lleva la colaboración al límite de lo imposible”.
Must Know:
El espacio fue creado en conjunto con Michael Cayre, desarrollador visionario, quien también es cofundador y director ejecutivo de Casa Cipriani y Midtown Equities, y ha desempeñado un papel fundamental en la transformación de paisajes y la revitalización de comunidades.
Mercer Labs: El Museo de Arte y Tecnología redefine la experiencia del museo a través de quince espacios de exposición interactivos, encuentros auditivos únicos e instalaciones inmersivas donde se desafía la relación entre el arte y la tecnología.
