Rubí llega a la Condesa con una propuesta que rompe con la idea tradicional de coctelería. Su carta se construye alrededor de dos inesperados: el vino y el vermut. Ingredientes que, lejos de ser acompañantes, toman el protagonismo en mezclas que sorprenden tanto por su elegancia como por su complejidad. ¡Conócelo!

Desde la entrada, la experiencia se siente diferente. El interior, cálido y sofisticado, abre paso a una barra con forma de joya donde cada coctel se presenta como debería. A unos pasos, la terraza con vista al Parque México crea el escenario perfecto para prolongar la tarde o darle un giro distinto a la noche.

La coctelería de Rubí propone un recorrido que explora etiquetas internacionales y reinterpretaciones ingeniosas. El Jazmín Negroni, con sus notas florales y secas; el 3x Americano, que combina vermut y soda de café; o el Aperol Spritz renovado con maracuyá, son solo algunos ejemplos de cómo el lugar ofrece otra versión de drinks clásicos.

La cocina se suma como aliada de esta narrativa. Platillos como el risotto al azafrán, el carpaccio de atún o la hamburguesa de res funcionan como maridajes naturales para cada trago, convirtiéndose así en un espacio donde los sabores conviven con armonía.

Rubí celebra el vino y el vermut - ruby-inauguracion-123
Fotos: cortesía

Rubí plantea un ambiente que también se convierte en ritual: un espacio donde el tiempo parece desacelerarse y cada detalle invita a redescubrir el arte de la coctelería. Su concepto busca que los comensales prueben un coctel y que vivan una experiencia visual y gustativa que redefine el encuentro alrededor de la mesa.

Rubí se perfila como un espacio para quienes buscan ese bar diferente en la CDMX. Ya sea en una cita o entre amigos, cada momento se convierte en la excusa perfecta para descubrir nuevas formas de disfrutar el vino y el vermut.

D. Av Sonora 189C, Hipódromo, CDMX

IG. @rubibar_mx