Bestias enormes se deslizan por la playa, como sacadas de otra dimensión. Criaturas desconocidas, esqueletos que cobran vida y danzan con un ritmo armonioso e hipnótico por las tranquilas arenas de la costa holandesa. Así es Strandbeest (que en holandés significa “animales de playa”), un conjunto de esculturas cinéticas de plástico y materiales de desecho. Las creaciones del artista e inventor Theo Jansen caminan como si tuvieran vida propia, impulsadas únicamente por la fuerza del viento.
Las bestias nacen de la preocupación del artista por el aumento del nivel de los océanos y lo complejo que este escenario resulta para Bélgica, Holanda y Luxemburgo, cuyas tierras se encuentran en su mayoría bajo el nivel del mar. Así, estas creaciones fueron pensadas para trasladar arena desde el borde del océano y formar una duna eterna, a modo de barrera, que proteja las costas y a sus habitantes.
Las criaturas han ido evolucionando a lo largo de los años, por lo que Jansen las ha dividido en períodos. Las primeras están catalogadas como Gluton Period (1990-1991). Su característica principal es ser esculturas compuestas por tubos pegados con tape. Luego viene el periodo Animalis Vulgaris, en el que las criaturas no eran capaces de ponerse en pie por sí solas, sino que reposaban de espaldas, moviendo sus largas piernas. Finalmente, viene Chorda Epoc (1991-1993). Durante este periodo, los tubos ya no fueron pegados, sino que empiezan a ser unidos con cuerdas.
Hoy algunas bestias no necesitan del viento para moverse. Son capaces de almacenar en sus estómagos aire comprimido, el cual les permite impulsarse a sí mismas al entrar en contacto con el agua o saliendo de esta. Es tal el nivel de perfección de sus obras que incluso, al detectar obstáculos, cambian su curso para evitarlos.
Las bestias emigraron de su país de origen y ahora recorren el mundo. Han visitado ciudades como Londres, Madrid, Santiago, Tokio, Miami y Seúl. En 2017 pasearon majestuosas por las playas de Sinaloa. Alcanzaron tanta fama que incluso aparecieron, junto a su creador, en un capítulo de Los Simpson.
Actualmente, las criaturas continúan evolucionando. Por su parte, Theo Jansen sigue asombrando al mundo con su genialidad.