Los grandes nacen a través de sus legados, aquellos quienes prevalecen en la memoria y escriben los nuevos capítulos de la historia. De esta manera, Clase Azul México se ha coronado como el destilado ultra premium más reconocido en el país por la exquisitez de su sabor y el cuidado minucioso en la creación de sus licoreras. En esta ocasión, dedicamos nuestras líneas a homenajear a cinco de los protagonistas de su archivo.
El lujo habla por sí mismo a través de Clase Azul, ya que esta marca originaria de Guadalajara, Jalisco ha logrado desde 1997 crear un portafolio impecable con cada uno de sus destilados. Además, no solo se ha hecho de renombre por el líquido perfecto que ofrece, sino que también se ha vuelto un objeto de deseo para infinidad de coleccionistas en todo el mundo por la artesanía de sus botellas.
“Cada destilado cuenta una historia. En Clase Azul México, esa historia se amplifica a través del trabajo de los artesanos que revisten el líquido con una licorera que refleja su naturaleza exquisita. Es una historia sobre México que se cuenta en cada gota y en cada pincelada”, comentó Viridiana Tinoco, maestra destiladora de Clase Azul.
Entre sus íconos de tequila, las etiquetas que encabezan su archivo son:
- Clase Azul Tequila Plata: captura el sabor fresco del agave, mientras su traslúcida licorera revela el resplandor de un tequila puro.
- Clase Azul Tequila Reposado: al ser guardado en barricas de whiskey americano durante ocho meses, tiene un sabor más concentrado. Por otro lado, su licorera revela trazos azul cobalto y decoraciones completamente hechas a mano.
- Clase Azul Tequila Gold: refleja el destello con sus líneas a mano con oro de 24 quilates y su sabor particular que reposó en barricas de roble francés y un extra añejo en barricas de jerez.
- Clase Azul Tequila Añejo: un trayecto de más de dos años en barricas de whiskey americano, y una licorera que representa el crecimiento de un agave hasta convertirse en tequila.
- Clase Azul Tequila Ultra: cuenta con una maduración de cinco años en barrica de whiskey americano y jerez, y una pintura en platino que solo las artesanas de Clase Azul son capaces de dominar.
Cada uno de estos cinco protagonistas tiene una historia particular. Aquí, todos los sentidos se regocijan al probar y admirar a estas etiquetas.
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