Premiado con el AAA Five Diamond Award, el primogénito de la cadena Park Hyatt ofrece una experiencia multi sensorial en cada uno de sus 25 pisos por medio del arte, diseño y amenidades caracteriza- das por la impecable atención al detalle.
El edificio se encuentra frente a la icónica sala de conciertos Carnegie Hall y a una cuadra de Central Park, entre los hoteles y residencias de la máxima opulencia e historia en la Calle 57 de Midtown Manhattan, conocida como “Billionaire’s Row”, emblema de la cultura empresarial neoyorquina.
HISTORIA
El hotel es el primero de los 34 que actualmente componen la cadena norteamericana en el mundo, con locaciones en algunas de las ciudades más influyentes como París, Dubái, Moscú, Abu Dhabi, Tokio o Shanghái.
Su apertura en 2014 marcó un parteaguas arquitectónico en la zona, ya que se hospeda dentro de One57, edificio diferenciado en su momento por la estética lineal que caracteriza a la arquitectura contemporánea, obra del Premio Pritzker 1994, Christian de Portzamparc. No es coincidencia que el arquitecto francés fuera el elegido para diseñar el rascacielos, pues el premio, considerado el Nobel de la arquitectura, corresponde a la iniciativa del fundador de la cadena Hyatt, Jay Pritzker y su esposa Cindy.
Los Park Hyatt combinan las mayores pasiones de su funda- dor: arte, gastronomía, vinos exquisitos y servicio de primera calidad. Cuando el primero de la familia vio la luz, quince años después de la muerte de su fundador, estas pasiones viven y permanecen como el ADN de la cadena.
DISEÑO
El estudio canadiense Yabu Pushelberg fue el responsable del interiorismo del hotel, pensado como un espacio social y de disfrute para todo tipo de gustos. Estos codiciados expertos en diseño multidisciplinario han trabajado tanto para clientes privados como para empresas de la talla de Carolina Herrera, Bergdorf Goodman y Kate Spade, entre otras.
El interior del hotel está inspira- do en el estilo residencial innegable del Upper East Side. Los espacios ofrecen una galería de arte en permanente circulación, mobiliario a la medida y suntuosos materiales, los cuales le otorgan un aire residencial tanto a las áreas comunes como a los espacios privados.
ARTE
Con más de 350 obras, la curado- ra Erica Samuels, de la firma Art & Advisory, fue la mente detrás del híbrido entre galería y hotel. La colección que alberga el Park Hyatt New York es una mezcla de nombres reconocidos como Richard Serra, Elizabeth Peyton o Matt Saunders.
Se suman muchos otros artistas contemporáneos que trabajan y viven en la ciudad, como James Nares, con la obra West on Sunrise, ubicada en la espaciosa Sui- te Presidencial, Dan Miller, Marc Swanson y Rob Fischer. Algunas obras fueron comisionadas especialmente para el hotel, en total diez, ubicadas entre la entrada principal, áreas comunes, pasillos y habitaciones.
SPA NALAI
En el piso 25 del hotel se encuentra el spa, cuyo nombre significa ‘serenidad’, en lenape, lengua de la tribu nativa que originalmente habitó Manhattan. Los servicios del spa equipado con seis suites de tratamientos, terraza, sauna y jacuzzi son una combinación entre rituales de wellness ancestrales y lo último en tratamientos que van desde faciales y masajes hasta servicios integrales.
La alberca de agua salada de 20 m de longitud está ubicada en un atrio de tres pisos de altura y en la cual, debajo del agua, se escuchan las notas clásicas de Carnegie Hall, mientras que su exterior lle- no de luz natural ofrece una vista panorámica al Midtown.
En el mismo piso se encuentra el gimnasio de 550 m abierto a cualquier hora y con vistas al skyline. La maquinaria es de última tecnología en fitness, como bicicletas Peloton y equipo de cardio Technogym.
GASTRONOMÍA
La oferta culinaria se concentra en The Living Room, bar y lounge reconocido por sus cocteles de autor, preparados por expertos mixólogos de la casa. Uno de los más famosos es Solitaire, elaborado con ginebra, jerez de manzani- lla, licor de Finocchietto y carda- momo. También cuenta con una amplia carta de champagne y de vinos para acompañar pequeños platillos y aperitivos creados por el chef Mathew Garelick.
La oferta del menú es extensa, con opciones como shawarma de cordero, papas a la francesa con trufa, samosas de tomate especiado y opciones del menú vegetal como ceviche de palmito o paté de avellanas y hongos rostizados.
Diseñado para imitar el ambiente de un departamento neoyorkino, el establecimiento es donde tanto huéspedes como público en general pueden disfrutar de la vista mientras prueban las opciones que ofre- ce el menú de desayuno o lunch. La especialidad de la casa por la mañana es el Park Egg Sandwich, elaborado con un huevo frito, burrata, pimientos en vinagre, arúgula, aioli de tomate y jalea de Porto con tocino.
ESTADÍA
En los 15 pisos del hotel se ubican 210 habitaciones con ventanales de piso a techo, de las cuales hay 14 variaciones distintas y 92 de las más espaciosas y lujosas suites de Manhattan.
Cada habitación inteligente está equipada con todo lo necesario para una estadía perfecta en la imponente ciudad. Por un lado, Internet de banda ancha, máquina de café Nespresso y por el otro, baño y tocador con pisos de mármol calentados y productos de la marca de fragancias francesas Le Labo y su exclusivo aroma Tubereuse 40, o el bar personal equipado para disfrutar de una copa de vino.
El Park Hyatt NY también ofrece la experiencia personalizable In Residence, la cual consiste en un servicio de cinco estrellas que ofre- ce el piso 19 del hotel, incluyendo nueve habitaciones y cinco suites con máxima privacidad.
A la par, se incluye una amplia lista de amenidades y experien- cias complementarias, como el servicio de concierge personal, Personal Shopper en Nordstrom NYC, alberca privada todos los días por dos horas o picnics de lujo en Central Park.
D. 153 West 57th Street New York, NY
@parkhyattny
parkhyattnewyork.com
Texto: Ana Olhovich
@anaolhovich
Fotos: Cortesía del hotel
