YAYOI KUSAMA : NARCISSUS GARDEN

The Glass House presenta Yayoi Kusama: Narcissus Garden, la última intervención de la renombrada artista conceptual con motivo de la celebración del 110 aniversario del nacimiento del arquitecto estadounidense Philip Johnsson y el décimo de la apertura de este recinto al público. Organizada por Irene Shum con la ayuda de la galería David Zwirner y Ota Fine Arts, esta instalación que se inauguró el 1º de mayo, está conformada por 1,300 esferas de acero flotantes (cada una de aproximadamente 30 cm de diámetro), creando una vista espectacular hacia el oeste de la casa de cristal. Estará vigente hasta el 30 de noviembre.

Originalmente, Narcissus Garden fue una instalación compuesta por 1,500 globos de plástico de color plata, creada hace cincuenta años, para la trigésima tercera Bienal de Venecia, que contó con el financiamiento del artista italiano Lucio Fontana. La instalación estuvo a disposición del público en el jardín del Pabellón Italiano, y al tiempo que se fungía de escultura, era una pieza de permanente performance, ya que cada esfera era vendida por la misma Kusama por el valor de dos dólares. El motivo de ponerle un precio a cada esfera fue visto como una forma de autopromoción, y al mismo tiempo, una protesta ante la comercialización del arte.

Por otra parte, aunque esta obra haya tenido múltiples interpretaciones, el verdadero propósito de la pieza, como su nombre lo indica, es un homenaje al mito de Narciso. En ella, las esferas de plata tenían la apariencia y el tamaño similar al de una bola de cristal de un adivino, de forma que la imagen de los espectadores y el de su entorno se refleja construyendo un campo de reflexión infinita. Al contemplar las esferas, el espectador se veía inmerso en una confrontación con la propia vanidad y con su ego.

Esta no es la primera ocasión en que la artista japonesa hace alusión al narcisismo. De hecho, tanto el reflejo que se multiplica hacia el infinito como la imagen que el espejo nos devuelve, son solo una de sus tantas obsesiones, así como los lunares que vemos repetidos constantemente en su obra.