Tuvimos la oportunidad de entrevistar a Luis Fernando Villegas, fundador de Academia Marengo y un gran apasionado del mundo ecuestre. Luis Fernando se dedica a formar jinetes, a entrenar caballos y a su compañía de espectáculos ecuestres. Aquí te compartimos más sobre su incomparable trayectoria, sus grandes pasiones y sus logros en la vida.
1. Cuéntanos tus inicios. ¿Cómo empezó tu pasión por los caballos?
Cuando tenía aproximadamente tres años, soñaba que los perros que teníamos en la casa eran mis caballos. Todo, cuando dibujaba, escribía o imaginaba, era caballos. Ninguno de los miembros de mi familia monta a caballo; sin embargo, uno de los mejores amigos de mi padre era criador de caballos de carreras y fue así como me acerque a ese mundo.
Comencé a montar a los cinco años en ranchos y aprovechaba cualquier oportunidad que se me presentaba. Posteriormente, a los 14 años, me inscribieron en un club de salto y, al año siguiente, ingresé a una escuela en la que conocí y me inicié en la equitación clásica. A partir de entonces, jamás ha pasado un día sin que deje de montar o aprenda algo de mis grandes maestros, los caballos.
2. Háblanos de tu día a día, de tu entrenamiento diario y de tu trabajo con los caballos.
Todos los días llego y saludo a cada uno de mis caballos; los reviso y formulo un calendario con horarios precisos para trabajar con ellos. Dependiendo de la edad de cada uno, desarrollo un plan de trabajo. En algunos casos, cuando son muy jóvenes, el proceso de entrenamiento es más largo, lento y minucioso, pero sumamente satisfactorio por la comunicación que se establece entre el entrenador y el caballo. En otros casos, cuando los caballos son más grandes, su entrenamiento se vuelve más avanzado y se persigue la perfección, que no existe, pero la búsqueda es apasionante. También, a diario cuento con alumnos que buscan formarse como jinetes, así que les doy clases para compartirles lo que mis maestros alguna vez me enseñaron.
3. ¿Cuál ha sido tu mayor logro?
Entre mis mayores logros podría mencionar dos: ser invitado especial de las cuatro escuelas de equitación clásica más importantes del mundo (Austria, Francia, España y Portugal) y otro de mis grandes logros, por el que luché incesantemente, fue haber conseguido ser becado en dos ocasiones por una de esas escuelas, la Real Escuela Andaluza del Arte Ecuestre.
4. ¿Cuál ha sido tu mayor reto?
Crear mi propia academia para formar jinetes y entrenar caballos, así como mi propia compañía de espectáculos ecuestres.
5. Cuéntanos sobre Academia Marengo.
Fundé Academia Marengo en el año 2014 y fue avalada por el jinete principal de la Escola Portuguesa de Arte Ecuestre. Dirijo esta escuela y enfoco todos mis esfuerzos en enseñar equitación clásica de la forma más tradicional posible, de modo que los caballos sean respetados, amados, valorados y apreciados por su nobleza y bellos movimientos, y las personas se transformen en grandes jinetes.
6. Platícanos sobre esa sensibilidad tan especial que tienes con los caballos.
Es difícil hablar sobre ese tema, sobre todo porque podría sonar petulante o falso, pero te puedo decir con absoluta sinceridad que, después de 35 años de practicar equitación clásica y más de 10 000 horas trabajando con estos animales tan maravillosos y perfectos, aprendes a desarrollar otro nivel de sensibilidad. Los escucho a través de su mirada, vibro con su respiración y vivo a través del latir de sus corazones.
7. ¿Cuál crees que es la importancia de promover la cultura ecuestre?
Lo más importante es entender que la equitación, cualquiera que sea la disciplina ecuestre, no es exclusiva de una clase social elitista. Por otro lado, si no aprendemos de la cultura ecuestre, simplemente no entendemos la evolución del hombre y sus conquistas por el mundo.
El arte ecuestre se encuentra a la par de la música, la pintura, la danza, la literatura, las artes escénicas… es considerado el deporte nacional de México y, además de contar con poco apoyo, está sumamente devaluado, todo por la falta de conocimiento.
8. ¿Cómo describirías tu experiencia en la industria del entretenimiento con respecto a tu trabajo en asesoría y coreografía ecuestre?
Si bien tengo una carrera de más de 30 años en los escenarios y festivales más importantes del mundo, no ha sido por querer ganarme un crédito o un premio, sino por la búsqueda y lucha incesante por mostrar y compartir este maravilloso arte que une caballos y jinetes en perfecta comunicación y armonía.
9. Platícanos sobre tu novela El mercader de caballos y sobre tu ensayo Caballos en escena.
El mercader de caballos es una novela basada en los valores humanos. En cada uno de los capítulos, el personaje principal, que desafortunadamente nació y creció en una situación económica y familiar precaria, lucha por salir adelante a través de su ambición por el dinero, sin saber que serán los caballos los que le enseñen uno a uno los valores humanos y lo transformen en un ser espiritual.
El mercader de caballos, editado por Trillas, se encuentra en todas las librerías de la República mexicana y también se puede adquirir a través de Amazon.
Por otro lado, Caballos en escena aún se encuentra en el tintero. Será un ensayo en el que compartiré muchas de mis experiencias y anécdotas vividas con los caballos en todo el mundo.
10. ¿Qué le depara el futuro a Luis Fernando Villegas?
Me gusta vivir el presente. Hoy me siento afortunado y satisfecho por estos 35 años de carrera: 12 años como comentarista de radio, 2 años como conductor de televisión, 12 años y 100 ediciones de mi propia revista de caballos, 15 años como director de escuadra en Marengo, mi compañía de espectáculos ecuestres, 6 años como director de Academia Marengo México y pocos meses de inaugurar Academia Marengo Bajío, un sinnúmero de exhibiciones y espectáculos… Mi futuro es seguir sembrando el amor, el respeto y la admiración por los caballos entre la gente que me rodea para que, como en mi caso, este magnífico animal logre transformar sus vidas y elevarlos a un nivel espiritual más alto.
Mi futuro se basa en seguir aprendiendo de los caballos, mis grandes maestros, y en compartir sus enseñanzas.
Mi futuro es mañana, así que espero con ansiedad montar mis caballos y brindar una clase maravillosa a mis alumnos para que se les quede grabada como una gran experiencia en sus corazones.
Amén.
Entrevista realizada por Renée Sotomayor
